Las grandes y pequeñas ciudades del mundo tienen sus calles inundadas de vallas y anuncios publicitarios coloridos, creativos, digeribles e intuitivos, que, aunque su propósito principal es vender -o persuadir a las personas- se convierten en un atractivo visual que, sin duda alguna, llenan el mundo de color, y esto gracias al Diseñador Gráfico.

Los mencionados anuncios no se realizan precisamente por arte de magia, aunque sí hay algo de ello en los programas de diseño, con los que se puede hacer infinidades de obras esplendorosas y sobresalientes, con las herramientas que ellos proporcionan.

Claro está, el principal creador y autor intelectual de dichos diseños es la mente de quién los hace, ya que, sin las ideas genuinas del diseñador, quién traza cada aspecto antes de plasmarlo, los programas no serían más que un montón de pestañas.

Gracias a ello, el diseño gráfico es parte del día a día de todo el mundo, y se convierte en una profesión indispensable para estos tiempos, donde el mercado digital es tan exigente, y flexible a la vez.

En ese sentido, se puede decir que dicha profesión se encuentra inmersa en cualquier ámbito, ya sea en el comercial, porque para vender es necesario que el producto o servicio sea atractivo, o en el educativo, donde se requieren ilustraciones intuitivas para aprender.

Pero sin duda alguna, el diseño gráfico se ve en cualquier lugar del mundo: en la televisión; cuando se ve una película en el cine; en los anuncios que se ven a lo largo del camino al viajar, en las publicaciones de las redes sociales, en el supermercado, o en los teléfonos inteligentes.

Por ello, y porque estamos comprometidos con la creatividad y la innovación, ponemos a tu disposición FGU-LAB, un espacio donde podrás adquirir todos los conocimientos y obtener las herramientas disponibles para la creación de Diseños Gráficos a través de la amplia cartera de herramientas de Adobe. ¡No te lo pierdas! Muy pronto, la creatividad será tu herramienta principal.

Autor(a):

Moisés Colmenares.