Maria Monro
Dicen que uno de los secretos mejor guardados de un gerente exitoso es el escuchar o mejor aún saber escuchar y hacerle saber a las personas que se las ha escuchado participando, haciendo preguntas, resumiendo lo que se ha escuchado. Un gerente líder debe tener la habilidad de escuchar y saber comunicar. Un Gerente buen oyente es una valiosa cualidad ya que permite conocer de primera línea como van las cosas.
Ser un oyente activo es una destriza que se puede desarrollar hasta que comience a fluir con naturalidad, y un Gerente que sabe oír y lo demuestra, atraerá a sus empleados para que se incorporen a discusiones varias, que podrían prolongarse más de la cuenta y el Gerente necesita saber cómo concluir esa conversación, podría decir, déjame pensar cómo podemos resolverlo, o un aprecio mucho hayas venido, en algunas ocasiones podría ser necesario ser más directos y simplemente pararse de su silla como símbolo de que la conversación debe terminar.
Una vez que se habitúa a ser oyente, será cómodo y fluirá con naturalidad lo cual consolidará el cargo gerencial.